Para los amantes de las manualidades, decir que es vital cuidar de los materiales es una obviedad. A veces, sin embargo, saber que hay que hacer algo no es suficiente: también hay que saber cómo hacerlo correctamente.
Cuando hablamos de sellos de goma, podría parecer que su mantenimiento y limpieza es muy sencillo. De hecho lo es, pero como decíamos, hay que saber cómo hacerlo. Hay que cuidar bien los sellos de goma para que no pierdan efectividad y para que podamos seguir utilizándolos durante muchísimo tiempo como el primer día.
Limpiar nuestros sellos de goma no es algo complicado de hacer. Todo cuanto necesitamos es una esponja, detergente especial para lavar la vajilla, un poco de agua y una bayeta o un trapo. Es importante que este sea de microfibra o de algún otro material suave para que la goma del sello no se dañe.
El proceso para limpiar los sellos de goma correctamente es el siguiente:
- Humedecer levemente la esponja. Hay que vigilar con el agua, porque utilizar una esponja demasiado mojada puede estropear el sello, ya que la goma es un material muy delicado. La mejor forma de preparar la esponja es humedecerla, colocarla encima de una superficie recta, echar encima una pequeña gota de detergente y extenderla con los dedos.
- Para limpiar el sello, hay que poner el sello encima de la esponja e ir presionando suavemente. De esta forma vamos a quitar la tinta adherida a la goma. En cuanto veamos que la tinta ha desaparecido, hay que secarlo con un trapo.
Ese es el procedimiento básico para limpiar los sellos de goma si queremos retirar restos de tinta o de pintura. Sin embargo, si lo que queremos es acabar con manchas de pegamento, hay que añadir un paso: frotar la zona sucia con un trapo, y en el caso de que se trate de algún pegamento extra fuerte, hacerlo echando antes en el trapo una gota de acetona para facilitar que el pegamento salga. Si lo utilizas, vigila con las cantidades, ya que este producto puede dañar la goma.
Como ves, limpiar los sellos de goma no es nada complicado. Es importante hacerlo siempre después de utilizarlos para evitar que la tinta o la pintura que usemos con ellos se seque y luego sea más complicada se retirar.
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